El 21 de Mayo La Nación publicó un artículo que mencionaba que la empresa elegida para supervisar el Sistema Único de Boleto Electrónico (SUBE) había ofertado en la licitación 10 millones de pesos más que su competidora y el consorcio estaba formado por muchas personas ligadas a la Secretaría de Transporte.
En Febrero de 2009 la Presidenta había anunciado que en 90 días estaría listo el sistema, y aunque pasaron algo así como 1000 días, finalmente está entre nosotros. En Febrero de este año parecía que aumentaban las tarifas de tren y colectivo, pero Macri lo hizo antes con el subte, y las críticas que recibió hicieron que la nación revirtiera su idea. En ese momento todavía el nefasto Schiavi ocupaba la Secretaría de Transporte.
El Domingo pasado, 8 de Julio, Periodismo Para Todos recorrió los distintos domicilios del consorcio adjudicatario de la SUBE. Resultó que la empresa no existía antes de la licitación, y era una empresa fantasma, porque no se la pudo encontrar en los domicilios constatados en el contrato.
Casualmente unos días después, el 12 de Julio, Florencio Randazzo decidió suspender el contrato con la UTE que supervisaba el SUBE, y dió instrucciones a la SIGEN para que investigara el asunto.
Esta misma semana fue destituido en Intendente de Pinamar, por irregularidades en la entrega de viviendas sociales, aunque las viviendas siguen en poder de sus ilegítimos ocupantes. Esta investigfación la inició Gonzalo Rodriguez, notero de CQC.
Mirá vos, al final el periodismo no era tan malo como decía Abal Mentira, capaz hasta sirve para descubrir hechos de corrupción. La función le correspondería a otros, pero es lo que hay...
